Saltar al contenido
Portada » LAS HISTORIAS QUE NOS CONTAMOS

LAS HISTORIAS QUE NOS CONTAMOS

En demasiadas ocasiones, nos contamos historias a nosotros mismos para no llevar a término nuestras metas y objetivos, tendemos a relatarnos una historia acerca de lo que nos ocurre en nuestras vidas, siempre desde nuestro sistema de creencias y nuestras emociones. Esto está bien siempre y cuando no nos contemos historias que nos resten.

Alguna de las historias que nos contamos, nos dan fuerzas y otras nos la quitan, unas nos movilizan y otras nos paralizan. Tenemos conversaciones con nosotros mismos que pueden funcionar como un freno, o por el contrario, como un impulso. 

Cuando nos contamos una historia llena de excusas, nos sentimos víctimas del entorno porque de esta manera nos eximimos de responsabilidad, lo hacemos para estar bien con nosotros mismos. Nos convencemos de que si no hemos llegado a dónde nos proponiamos, no es por nuestra negligencia sino porque nos hemos encontrado con muchos impedimentos, por ejemplo, no tener tiempo, tener demasiado trabajo, ser demasiado mayor, etc. En muchas ocasiones, la mayoría, simplemente lo achacamos a creernos que tenemos mala suerte, que el resto de las personas llegan a sus metas porque la vida les sonríe, pero a nosotros no.

En estos casos se busca un culpable y nunca eres tú, puede ser tu jefe «que te oprime», tu pareja «que no te apoya», tus hijos «que te esclavizan» e incluso a veces, se recurre a los problemas que tuvimos en nuestra infancia. Cualquier argumento nos es válido, porque nos ponemos excusas para estar más tranquilos ya que la culpa está fuera, nosotros no somos la causa de no haber alcanzado nuestras metas. Además solemos buscar la reafirmación en la gente que tenemos cerca para que nos confirme que somos perfectos y que las circunstancias que nos rodean están fuera de nuestro control, de esta manera nos resignamos en la idea de que ya no hay nada que hacer, buscamos la compasión de los demás para convertirnos en víctimas.

Estas historias que nos contamos nos pueden sacar del dolor, pero no nos sacarán nunca del problema, nos autojustificamos para ser coherentes con nuestro comportamiento aunque no nos sintamos orgullosos de él. 

En muchas ocasiones, inconscientemente, se prefiere el fracaso de no intentar lo que soñamos, al fracaso de hacerlo y fallar, pero debemos tener algo en cuenta, tenemos el poder de cambiar nuestra historia presente y futura, nunca es tarde para alcanzar ese cambio.

Todos en mayor o menor medida hemos vivido momentos traumáticos, trágicos, es complicado que nuestras heridas cicatricen y muy difícil olvidarnos, pero no podemos estar toda la vida soportando ese dolor, no nos merecemos seguir pagando el precio de un dolor que ya pasó, no podemos albergar esos rencores por algo que ya no existe. Esto supone un acto de amor hacia tí mismo, es importante eliminar todas las emociones tóxicas y hacer una higiene emocional. Es importante por todo lo que aún te queda por vivir.

Debemos crear el hábito de hablarnos con amor, respeto y compasión convirtiéndonos en nuestros mejores aliados, si comenzamos a contarnos historias que nos potencien, el modo en que nos sentimos cambiará drásticamente. Podemos conseguir historias que nos motiven, que nos mantengan en una actitud optimista y que nos hagan salir adelante, de esta manera fomentamos la resiliencia. No olvidemos que para alcanzar una meta debemos de tener confianza en nosotros mismos, es fundamental tener un compromiso verdadero para que aparezcan recursos que no podrías ni imaginar. Aunque el camino sea estrecho y lleno de retrocesos, incluso habrá caídas, pero tener ilusión y perseverancia hará que todo se ponga en marcha. Hemos de motivarnos, creer en nosotros mismos, valorarnos más, tenemos que creer de verdad que lo vamos a lograr. La ilusión y las ganas te ayudarán a seguir. Si te caes te levantas. No puedes boicotear tu éxito. No debemos quedarnos en nuestra zona de confort, tenemos que retarnos. Muchas veces nuestra mente nos recordará que el objetivo está lejos, pero no tenemos que dejarnos vencer. Cuéntate historias que te sumen, nunca que te resten.

Pregúntate: ¿Esta historia que me cuento me da fuerzas o me la quita?, ¿me impulsa al cambio o me paraliza?, ¿necesito la ayuda de un coach personal para lograrlo o soy capaz de hacerlo sola / solo?.

Piensa en grande, crea la historia más increíble de tu vida.

6 comentarios en «LAS HISTORIAS QUE NOS CONTAMOS»

  1. Qué gran relato!!! Me he sentido muy identificada con muchos de los elementos que expones… Cuántas excusas ponemos a veces para evitar el cambio!!!… Tendré en cuenta tus palabras, me serán de gran ayuda. Muchas gracias por compartir de nuevo tu sabiduría María Luisa!😘😘😘😘

    1. Me alegra muchísimo saber que te ha gustado y sobre todo saber que te sirva de ayuda. Nos tenemos que atrever a dar el salto, el poder está dentro de ti.
      Gracias por leerme.
      Un abrazo 🤗

  2. Estupendo artículo, es verdad que nos ponemos mil excusas y encima pensamos que el mundo tiene la culpa por no llegar a dónde queríamos. Nos falta motivación y ganas. Me encanta lo que dices de pensar en grande

    1. Gracias Monica, tenemos que ser perseverantes y con ilusión,motivación, confianza, compromiso y autoestima conseguirás todo lo que te propongas.
      Gracias por leerme
      Un saludo

  3. Valorarse, motivarse, ilusionarte y creer en ti misma, ¡cuánta razón tienes! Nos habituamos tantas veces a convivir con esas emociones tóxicas que comentas…
    Muchas gracias por tus maravillosos y sabios consejos, una gozada seguir tus publicaciones. 👍🙂

    1. Si Ana, nos ponemos demasiadas excusas a nosotros mismos por no atrevernos a salir de nuestra zona de confort.
      Muchísimas gracias por leerme.
      Un abrazo 🤗

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *